Buenas noches viajero del tiempo

Buenas noches viajero del tiempo.
Bienvenido a mi mundo, es oscuro, pero se está bien...


viernes, 30 de agosto de 2024

Paraguas y elefantes

Me despierto más temprano de lo habitual. El cielo está nublado. Me visto de pies a cabeza para salir cuanto antes. Miro por la ventana, parece que lloran los cristales. Puedo escuchar incluso cómo cae la lluvia del cielo, ese golpeteo en la azotea marcado por el ritmo de las gotas.

Ojalá el sol viniera y se quedara pero parece que, una vez más, olvidé lo que me mantiene cálida y segura. Además, ésta es una canción para los días lluviosos.

¿Y si bailamos bajo la lluvia sin prestar atención a todas esas personas que nos miran desde dentro? Así dejaremos atrás todas nuestras preocupaciones y entonces podrás escucharlo: ese golpeteo en la azotea, el ritmo de las gotas, el sonido de los truenos a lo lejos... esa canción de días de lluvia.

Sé que, una vez que las nubes derramen sus lágrimas sobre las mías, estaré bien. Incluso si la lluvia siempre gana, incluso si me obliga a cerrar los ojos para soñar. Pues soñaré con días más brillantes. Sin el golpeteo en la azotea. Sin el ritmo de las gotas. Sin el sonido de los truenos. El sol vendrá y se quedará.

Pero hoy, sonará la canción para días de lluvia.

martes, 27 de agosto de 2024

Limerencia

Ella vive en un cuento de hadas dentro de su cabeza. En algún lugar demasiado lejos para que podamos encontrarlo. Olvidó el olor y el sabor de aquel mundo que había dejado atrás. Yo traté de hacerla entender que tenía que volver al mundo real, porque todo estaba patas arriba sin ella. Pero no parecía escucharme, sólo repetía en susurros: "es difícil mantener los pies en la tierra cuando tu cabeza está en las nubes".

"Ve y busca tu pala y cavaremos un hoyo profundo para enterrar el castillo. Lo haremos juntas." Empezamos a cavar bajo la lluvia mientras las mariposas revoloteaban a nuestro alrededor.

Entonces él la encontró llorando, cubierta de barro con la pala entre sus manos. Finalmente, su príncipe vino a salvarla. Y el resto lo puedes deducir... Pero fue sólo un truco y el reloj marcó las 12, desapareció el hechizo y tuvo que asegurarse de construir su casa ladrillo a ladrillo para que nadie pudiera derribarlo. Para que la realidad no pudiera con ella. Yo le repetía: "Mantén tus pies en la tierra aunque tu cabeza esté en las nubes". Construyó un mundo de magia porque su vida real era trágica. Construyó un mundo de magia porque el suyo era un desastre. Si no es real no puedes sostenerlo en el tiempo... pero si es de verdad, puedes verlo con tus ojos, puedes sentirlo en tu corazón, incluso en la oscuridad. "Ahí es donde debes estar... Ve a buscar tu pala y cavaremos un hoyo. Enterraremos el castillo."

 La obsesión de ser amada es lo más placentero y estúpido que he sentido en toda mi vida. 

viernes, 23 de agosto de 2024

Los sentimientos

Archivaba sentimientos como si fueran chats. No recuerdo si estaban ordenados por letras o por colores en las carpetas. Abría los grandes cajones y los volvía a cerrar con llave cuando quería. Al salir, me aseguraba de echar el pestillo de la puerta.

Un día como otro cualquiera, fui a buscar uno. Giré el pomo con cautela y respiré hondo antes de entrar. No lo podía creer, para mi sorpresa todo los sentimientos estaban esparcidos por toda la habitación, los enormes archivadores estaban en el suelo, rotos. Como si hubiera pasado un huracán. Como si una bomba hubiera explotado ahí mismo, en el centro de mi corazón. Abandoné la estancia, no sabía qué sentir ni cómo buscar ningún sentimiento. Estaba todo desordenado. Yo estaba desordenada. Tampoco tenía fuerzas de arreglarme. Estuve un tiempo sin volver, sintiéndome como un fantasma sin rumbo, sin emociones. Sin respuestas.


Hasta que un día todo cambió. Algo dentro de mí se revolvió. Volví, y sin quererlo, descubrí algo extraordinario...

martes, 20 de agosto de 2024

He vuelto

Hoy he vuelto a ese lugar donde solía ir, clavándome Madrid. Estaba temblando después de haber estado bailando hasta el amanecer. Y he estado pensando en cómo me trata la vida ahora que todo es diferente. Llevaba años escondiéndome de la ciudad, delirando entre mis pesadillas e ignorando mi cuarto café. Jurando que no me iba a pasar otra vez.

Quise contarte en susurros cuando llegué a tu portal, que todo había salido fatal. Siempre buscando a oscuras cualquiera que calme mis dudas...